Documental que profundiza en los cuatro elementos del hip hop, en la ciudad que lo vio nacer, Nueva York. El breakdance, el djing, el mcing y el graffiti son los componentes de esta cultura urbana, centrándose en el graffiti este documental. Las amistades y enemistades que surgen entre los graffiteros, su visión del movimiento, la opinión de sus familias, y de los afectados por sus actos, desde los responsables del transporte metropolitano de la ciudad hasta de los propios usuarios, en una época, en la que los vagones del metro eran la superficie favorita de los escritores de graffiti. (FILMAFFINITY)
Cartel del documental |
No es un producto nuevo. Nada más lejos de la verdad. Este trabajo audiovisual es del año 1983, y está basando en la Nueva York del Bronx y Broadway. Pero también es válido ahora, independientemente de que se siga o no pintando en los vagones de los trenes, de que ahora esté más o menos fácil hacerlo o impedir que se haga. Hoy en día siguen existiendo estos "artistas de la calle", y su modus operandi es muy parecido.
Los protagonistas de esta historia son los auténticos jóvenes cuyo nombre o apodo aparecía cientos de veces en los trenes del Metro de Nueva York. Un seguimiento de todos aquellos "escritores", como se hacen llamar, que "bombardeaban" la ciudad neoyorkina con sus firmas y "piezas".
Una de las piezas mostradas en la cinta |
Una madre que no está de acuerdo con lo que hace su hijo, pero a pesar de esto él se lo cuenta todo. El encargado de perseguir este tipo de actos por parte de la policía. Un grupo de breakdance. Los graffiteros más leídos de toda la ciudad, enfrentados a veces entre ellos. Todos ellos tienen cabida en este documental, que es anterior a muchos de los lectores de este artículo, pero en el que, seguro, veremos similitudes con la época que estamos viviendo.
Un buen trabajo por parte de los directores. Un resultado dinámico y atractivo, que no se postula ni a favor ni en contra de este perseguido arte, símplemente lo cuenta. Quizá si muestra más de aquella parte que se dedica a pintar y no a perseguir, pero realmente es justo, es la menos conocida en esta contienda.
Si os sobra una hora y diez minutos en vuestra agenda, podéis emplearla en ver este documental. De nuevo, como hice con La Vida Loca de Christian Poveda, dejo el documental íntegro para que lo veáis desde aquí.
Saludos en tinta.
Ahora mismo no me sobra tiempo jj, pero algún día le echaré un ojo. Un saludo!!
ResponderEliminarpues debe dejar de ser un libro pendiente y pasara ser uno de tus libros de referencia...te lo aconseja martuu jajjajaj un besooote
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